Entendía que se trataba de una comedia romántica sin embargo resulto ser un drama moderno y muy bueno por cierto.
Dean Pereira (Ryan Gosling) y Cindy Heller (Michelle Williams) son una pareja de esposos jóvenes, quienes aun así han pasado por muchas cosas en sus vidas. Ella es enfermera y trabaja en una clínica; tiene una hija de nombre Frankie. El trabaja como pintor.
La historia es narrada en dos tiempos, la vida actual, un tiempo después de que decidieran casarse y mudarse juntos. El otro tiempo consiste en como se conocieron y se enamoraron.
Cindy proviene de una familia disfuncional, sus padres nunca le mostraron lo que es un hogar y mucho menos la armonía en familia. Esto la llevo a tener muchas relaciones problemáticas. En el caso de Dean también proviene de una familia con problemas, dejo la escuela a temprana edad, no cree en el matrimonio ni en tener hijos, aunque Cindy le hizo cambiar de parecer cuando la conoció. Sin embargo no tiene ninguna ambición en la vida, de hecho le encanta su trabajo porque entiende que puede tomarse una cerveza a las 8am y estar en su casa con su familia. Cindy por su parte entiende que este tiene un potencial muy grande el cual esta siendo desperdiciado.
En los últimos días su relación ha tenido encuentros fortuitos, ya no tan deseados y que dejan a ambos exhaustos por el camino que ha tomado la relación. Las cosas ya no son lo que fueron y existe la posibilidad de que nunca mas lo sean.
Es una historia muy contemporánea, real y pura en el mas profundo de los sentidos.
Las actuaciones de Michelle Williams y Ryan Gosling son excepcionales, su retrato de una pareja en tal situación es llevada a la pantalla de la manera mas convincente posible.
No se lo pierdan si quieren ver un melodrama de estos tiempos, muy bien realizado.
De verdad que Ryan Gosling no deja de sorprenderme, esta película es del 2003 pero ya se veía la promesa.
La historia cuenta un tremendo drama entre dos familias y sus vidas, como todos son afectados por las decisiones que se toman entre ellos.
La historia empieza contándonos el asesinato cometido por Leland Fitzgerald (Ryan Gosling) y de como simplemente no encaja su perfil, con el perfil que debería tener el asesino. Leland es enviado a un correccional donde entablara una relación con su profesor Pearl Madison (Don Cheadle), quien pretende escribir un libro sobre este.
Poco a poco Leland ira revelando los detalles detrás de el porque cometió el crimen.
Igualmente los sentimientos encontrados de los personajes afectados por este asesinato irán saliendo a la luz, el padre de Leland, Albert Fitzgerald (Kevin Spacey), un escritor que vuelve a casa tras el arresto de su hijo, el dolor que siente su madre Marybeth Fitzgerald (Lena Olin), Becky Pollard (Jena Malone), la hermana de la víctima y ex novia de Le-land, particularmente marcada por los acontecimientos.
La relación entre Julie Pollard (Michelle Williams) y su novio, Allen Harris (Chris Klein), la cual drama la imposibilita, y sobre todo los padres de la victima Harry (Martin Donovan) y Karen Pollard (Ann Magnuson), que no entienden como afrontaran su nueva situación.
Queda al relieve el hecho de que a veces es necesario que sucedan situaciones extremas para que sean notadas las virtudes y la bondad de las personas, de como un hecho trágico cambia la forma de vida de un grupo de personas, y de como una sociedad permisiva prevé que no se tengan motivos para cometer un crimen.
Un drama exquisito que vale la pena disfrutar, una historia profunda y llena de dolor que nos hará ver en nuestro interior.
Danny Balint (Ryan Gosling) un ex-alumno de la escuela judía de New York se transforma con el tiempo en una Nazi Antisemita, y pretende acabar con los judíos de una vez y por todas.
Cuando Danny encuentra información sobre un grupo Fascista en Internet estos le reciben con los brazos abiertos, ya que este es un intelectual por naturaleza y atrae a las masas, cosa que el grupo puede aprovechar para sus propósitos.
El problema es que a medida que pasa el tiempo y Danny se va transformando en el neofacista que pretende ser, se va horrorizando consigo mismo pues una personalidad paralela judía esta en su interior que no le permite ser quien todos esperan que sea.
Todo esto conlleva a que Danny conviva con dos mundos a la vez, uno y su opuesto, la Esvástica y la estrella de David, los cuales trataran de tener la vida que quieren pero que le llevara
directamente a su propia destrucción.
Una magnifica actuación de Ryan Gosling, la historia esta basada en hechos reales que le ocurrieron a un miembro del KKK en los años 60’s.
Verán, Lars (Ryan Gosling) es un tipo introvertido con un pequeñito problema (ok no tan pequeño, Ok then A Hugeee), se ha recluido a si mismo de las relaciones interpersonales.
Osea Lars es una persona normal en el sentido completo de la palabra, trabaja, vive bien, se comunica claramente, pero no me permite que le toquen, y aparte de su trabajo no habla ni socializa con nadie, aunque vaya los domingos siempre a misa.
Todo tiene un ritmo pre-establecido, hasta que Lars es visitado por una mujer, religiosa, con valores morales muy profundos pero con un cuerpo “hecho a la medida” de tu imaginación. Tampoco esto fuera tan extraordinario si no fuera porque dicha mujer no es humana.
En principio Lars sera tildado como un loco, pero cuando su hermano Gus (Paul Schneider) y su esposa Karin (Emily Mortimer) deciden llevar a “Bianca” al doctor aprovecharan para que la doctora Dagmar (Patricia Clarkson) también ayude a Lars.
La terapia consistirá en seguirle el “juego” a Lars, y pasara los mas extraño cuando todo el mundo se encariñe con Bianca y Lars descubra otras cosas que se estaba perdiendo.
Una película de ciencia ficción bien interesante, al principio es un poco aburrida pero luego se torna interesante cuando todos quieren formar parte de la vida de Lars.
Muy buena las actuaciones de Ryan en esta película.