Su propio hermano lo define como un hombre de mujeres, siempre es lo que ha tenido en su vida, sus novias y nunca ha tenido amigos. Ese es Peter Klaven (Paul Rudd), un hombre que su vida gira en torno a sus actividades en el negocio de los bienes raíces y su prometida Zooey (Rashida Jones).
Están a punto de casarse solo que Peter tiene un pequeño dilema, a quien llevar a la boda como padrino, es que ni siquiera tiene un amigo. Ahí es cuando entra en escena sus cercanos, entiéndase su hermano Robbie (Andy Samberg) y Zooey, se encargaran de arreglarse varias “citas” con algunos hombres que resultaran en una que otra situación bastante incomoda.
Un día mientras realizaba un Open House (vendiendo una propiedad se abre al publico y se les espera con bocadillos), conoce a Sydney (Jason Segel), un amigable pana con el cual Peter inmediatamente se lleva bien.
La relación entre los dos empieza muy bien, pero a medida que van pasando los días y se van introduciendo uno a la vida del otro, las cosas comienzan a cambiar y no para bien.
La relación de Peter con Zooey se ve amenazada y para colmo su carrera también.
En ese proceso Peter descubrirá muchas cosas de si mismo que no se esperaba y otras de su relación con Zooey.
Al final las cosas no saldrán como lo habían planeado, pero nunca se ha dicho que diferente sea malo y después de todo podrían ser hasta agradables.
Una comedia para pasar el rato y que logra de cuando en vez sacarnos una sonrisa y algunas carcajadas.
Danny (Paul Rudd) y Wheeler (Seann William Scott), son dos patrocinadores de una bebida energizante. Su trabajo consiste en ir de escuela en escuela haciendo presentaciones de este producto, exhortando a los jóvenes a que se mantenga fuera de las drogas y que en vez de eso consuman la bebida.
Para Wheeler, a quien solo le gusta la diversión momentánea sin ataduras el trabajo es lo máximo, le permite conocer mujeres y lo disfruta cada día mas; en cambio para Danny la cosa dista mucho de ser color de rosa, sintiéndose estancado se ha vuelto un gruñón pesimista, situación que le pone a discutir cada minuto, obviamente esto no se ve nada bien delante de los ojos de su novia Beth (Elizabeth Banks), la cual se siente estancada en una relación estancada.
Beth pondrá de patitas en la calle a Danny, el cual se molesta bastante y entre una y otra cosa, choca el vehículo de la empresa pero tienen la suerte de que en vez de ir a la cárcel consiguen un trabajo social de 150 horas en un programa didáctico para jóvenes llamado Sturdy Wings.
Aquí es que comienza la diversión, allí conocerán a 2 niños especiales. Ronnie Shields (Bobb’e J. Thompson), un niño con la boca super ultra mega plebe y que solo piensa en sexo, y a Augie Farks (Christopher Mintz-Plasse), un jovencito que se ha escondido en los juegos de roles para huir de su realidad.
La película me la encontré super divertida, el papel de Ronnie uffffffff mata de la risa a cualquiera.
Una que promete es la producción 9, producida por Tim Burton. Las animaciones son excelentes y la historia parece que sera buenísima, la historia sucede en una tierra post-apocalíptica.