Ryan Bingham (George Clooney) es un consagrado “despedidor” profesional, osea trabaja en una empresa que se dedica a asumir el rol de jefe cuando estos no tienen las agallas para despedir a sus empleados o cuando simplemente la empresa quiere impedir situaciones incomodas y/o desagradables. Su especialidad lo mantiene volando la mayor parte del año, mas de 340 días, por lo tanto el considera el avión, los hoteles su verdadera casa. No mantiene una relación estrecha con fu familia y tampoco mantiene amigos, siempre esta ocupado. Esto le ha permitido no apegarse a nada ni a nadie.
Todo lo que necesita lo lleva consigo en una sola maleta, de hecho es tan bueno en el negocio que a veces suele dar conferencias en este sentido, las millas de su tarjeta son tantas que es un miembro élite del programa de fidelización de viajeros, de hecho necesita muy pocas millas para llegar a su récord de vida, las 10 millones de millas.
Esto siempre ha funcionado para Ryan, cuando conoce a una viajera constante, Alex Goran (Vera Farmiga) las cosas comienzan a cambiar. Primero en su empresa su jefe le informa de nuevos cambios que se van a introducir en la forma de hacer su trabajo, esto gracias a la ayuda de Natalie Keener (Anna Kendrick), una chica que aunque con grandes ideas no entiende el negocio. Esto amenaza con la forma de vida a la que Ryan ya esta acostumbrado, así que para enfrentar este cambio se va a viajar con ella y enseñarle como son las cosas frente a frente. En este mismo periodo, Natalie lo hace ver que hay otras cosas mas importantes en la vida y esto le lleva a buscar mas de su relación con Alex y su familia.
Con una excelente carga dramática y muy buenas actuaciones Up In The Air es una muy buena película, aunque no tan buena para ser la mejor del año, en este sentido se queda muy corta. Por cierto Vega Famirga esta para morirse, wau que marrdito cuerpaso.
Lo primero es que de verdad no esperaba mucho de esta producción, de hecho ni recordaba de que trataba, sin embargo fue una sorpresa bastante agradable.
Como dice el eslogan, la Inteligencia es relativa.
Todo comienza con Ozzie Cox (John Malkovich) un agente de la CIA que después de ser sacado del proyecto decide renunciar y dedicarse en principio a escribir sus memorias, información la cual va colocando en su computadora personal. Hasta aquí todo bien.
El problema surge cuando su mujer Katie Cox (Tilda Swinton), quien le esta engañando se lleva de su abogado y comienza a recolectar información para el divorcio, cosa de tener sus finanzas bien claras. Katie copia la información de la computadora personal de su esposo y la copia en un CD, sin embargo este CD se pierde en el Gimnasio donde es encontrado por unos empleados sin escrúpulos.
Entre estos empleados esta Chad Feldheimer (Brad Pitt), un empleado medio idiota que jura que las cosas suceden en la vida como las películas. Cuando este lee la información del CD este consigue el numero de teléfono de Cox y pretende llamarlo con la intención de que este le de una recompensa.
Para esto se asociara con Linda Litzke (Frances McDormand), una mujer que esta entrando en edad y que quiere hacerse unas cuantas cirugías cosméticas. Nada sale como lo planeado y a Linda se le ocurre la idea de chantajearlo y así conseguir el dinero necesario para cubrir sus cirugías ya que el seguro no le cubre estas.
Para colmo de males Linda se ligara con Harry Pfarrer (George Clooney) un agente del tesoro que es con quien la esposa de Cox le esta engañando.
Entonces la historia se desenvolverá con Linda queriendo vender la información a los rusos, mientras que la CIA investiga la situación de venta de información y terrorismo, al mismo tiempo Chad es enviado a conseguir información en la casa de Cox, pero allí sera sorprendido por Harry y algo saldrá mal.
Todo se convertirá en un lió, todos pegándose los cuernos, mientras se confunden con que es lo que quiere hacer cada quien, una conspiración, persecuciones y la demostración de que la inteligencia es verdaderamente relativa.
Una producción muy agradable, muy ingeniosa y de verdad una muy agradable sorpresa.
Del reciente también director George Clooney nos llega esta comedia, a veces un tanto parodia sobre el surgimiento de la liga profesional de fútbol (NFL) en Estados Unidos.
Transcurre el año de 1925 y la National Futbol League (NFL) daba sus primeros pinitos. Dodge Connolly
(George Clooney) es el matatan del fútbol, el cual no tenia reglas escritas en ese entonces, obviamente el publico asistente lo hacia por gritar mientras bebía mas que para pagar una entrada.
Los partidos terminaban en batallas campales y no se veía cambio en esto a excepción de Dodge que creía posible que podría encaminar su equipo mientras que al mismo tiempo conseguía llenar los estadios.
La cosa se pone fea cuando su único patrocinador, un empresario de la industria del algodón, tira la toalla, se desintegra el equipo y con ellos casi toda la liga.
Ahí es cuando Dodge se le ocurre la brillante idea de traer de convencer al scout CC Frazier (Jonathan Pryce) y que este a su vez contrate a Carter Rutherford (John Krasinski) la estrella actual del fútbol universitario y que es capaz de llenar todos los estadios donde se presente.
Carter es un héroe de guerra, es apuesto y lo máximo en el campo de fútbol, lo que para muchos parece ser demasiado perfecto y es aquí cuando entra a escena Lexie Littleton (Renée Zellweger) quien tratara de desenmascarar la verdad que hay tras este héroe.
Mientras Lexie con su poca experiencia cubre la liga y busca en el pasado de Carter, este y Dodge pelearan por su amor.
Obviamente el nombre viene dado por los cascos que usaban los jugadores en aquel entonces hechos de Leather.
