Lo primero que deben saber es que se trata de una comedia como surrealista, osea aquí pasan cosas que son normales dentro del contexto de la película pero que si llegas a pensarlo simplemente no cuadran.
Ok ya sabiendo esto seguimos.
Hank (Thomas Michael) y Mike (Paolo Mancini) son dos amigos y compañeros que trabajan en una multi-nacional. Cual de los 2 mas diferentes, por ejemplo Hank le encanta estar embicando el codo y vivir de sabroso con las mujeres, en cambio Mike es un pana inseguro que por na del dible se da un trago y solo a la mala se le tira a las mujeres.
La vaina es que los dos panas trabajan como conejos de pascua, su trabajo consiste en la noche del día de pascua meterse a la casa de los clientes y esconder los dichosos huevos para que al otro día los niños disfruten de la aquella tradición. Sin embargo este año es diferente, la empresa esta teniendo inconvenientes con el presupuesto, así que se abocan a una reducción de personal y obviamente la idea es recortar por el que menos trabaja, teniendo en cuenta que la fiesta de pascua no es la gran cosa y que los empleados solo trabajan una vez al año y se les paga siempre por ahí comienza la cosa. Claro existe la percepción que no se bota a un conejo de pascua, es algo impensable para el dueño de la misma, sin embargo cuando a Hank se le olvida esconder un huevo en la casa de unos clientes serán despedidos.
La depresión atrapara a nuestros amigos y esto afectara su amistad. Podrán reponerse a la situación?, podrá su amistad soportar la tempestad de la crisis?, estas son algunas de las preguntas que le encontrara respuesta si se tiran la película.
La película no puede ser considerada un clavo, pero se que sera difícil de digerir para muchos, sobre todo por ese humor negro y con poco sentido que tiene. Anyway no la recomiendo al menos que usted le guste este tipo de cine.
De verdad que Ryan Gosling no deja de sorprenderme, esta película es del 2003 pero ya se veía la promesa.
La historia cuenta un tremendo drama entre dos familias y sus vidas, como todos son afectados por las decisiones que se toman entre ellos.
La historia empieza contándonos el asesinato cometido por Leland Fitzgerald (Ryan Gosling) y de como simplemente no encaja su perfil, con el perfil que debería tener el asesino. Leland es enviado a un correccional donde entablara una relación con su profesor Pearl Madison (Don Cheadle), quien pretende escribir un libro sobre este.
Poco a poco Leland ira revelando los detalles detrás de el porque cometió el crimen.
Igualmente los sentimientos encontrados de los personajes afectados por este asesinato irán saliendo a la luz, el padre de Leland, Albert Fitzgerald (Kevin Spacey), un escritor que vuelve a casa tras el arresto de su hijo, el dolor que siente su madre Marybeth Fitzgerald (Lena Olin), Becky Pollard (Jena Malone), la hermana de la víctima y ex novia de Le-land, particularmente marcada por los acontecimientos.
La relación entre Julie Pollard (Michelle Williams) y su novio, Allen Harris (Chris Klein), la cual drama la imposibilita, y sobre todo los padres de la victima Harry (Martin Donovan) y Karen Pollard (Ann Magnuson), que no entienden como afrontaran su nueva situación.
Queda al relieve el hecho de que a veces es necesario que sucedan situaciones extremas para que sean notadas las virtudes y la bondad de las personas, de como un hecho trágico cambia la forma de vida de un grupo de personas, y de como una sociedad permisiva prevé que no se tengan motivos para cometer un crimen.
Un drama exquisito que vale la pena disfrutar, una historia profunda y llena de dolor que nos hará ver en nuestro interior.